Tratamiento de conducto relacionado con una mejora del azúcar en sangre y la salud del corazón

17

La eliminación de las infecciones dentales mediante el tratamiento de conducto puede ofrecer beneficios sistémicos para la salud, incluido un mejor control del azúcar en la sangre y mejores marcadores cardiovasculares, según un nuevo estudio.

Para muchos, la idea de una endodoncia les provoca ansiedad. Sin embargo, las investigaciones emergentes sugieren que este procedimiento dental común podría tener efectos positivos de gran alcance más allá de la salud bucal. Un estudio siguió a pacientes sometidos a un tratamiento de conducto durante dos años y reveló mejoras significativas en los niveles de azúcar en sangre, colesterol y marcadores inflamatorios.

La conexión entre la salud bucal y sistémica

Cada vez se reconoce más el vínculo entre la salud bucal y el bienestar general. Las infecciones dentales prolongadas permiten que las bacterias ingresen al torrente sanguíneo, provocando inflamación y alterando los procesos metabólicos. Investigadores de la fundación NHS de Guy y St Thomas en Londres siguieron a 65 pacientes después del tratamiento de conducto, analizando muestras de sangre en múltiples puntos durante dos años.

Los resultados fueron sorprendentes: más de la mitad de las moléculas sanguíneas analizadas mostraron cambios significativos después del procedimiento. El metabolismo de las grasas mejoró a corto plazo, mientras que el control del azúcar en sangre obtuvo ganancias a largo plazo. Fundamentalmente, los marcadores de inflamación, un factor determinante de enfermedades cardiovasculares, diabetes y otras afecciones crónicas, también disminuyeron.

Implicaciones para la salud global

La Dra. Sadia Niazi, profesora clínica senior de endodoncia en el King’s College de Londres, enfatiza la importancia sistémica de la salud bucal. “Nuestra salud bucal está relacionada con nuestra salud general. Nunca debemos considerar nuestros dientes o enfermedades dentales como una entidad separada”.

Este hallazgo es particularmente relevante dada la prevalencia global de enfermedades bucales no tratadas. La Organización Mundial de la Salud estima que 3.700 millones de personas en todo el mundo padecen infecciones bucales no tratadas. Integrar la salud bucal en estrategias sanitarias más amplias podría tener importantes beneficios para la salud pública.

Más allá de las endodoncias: enfermedad de las encías y riesgo cardiovascular

Este estudio se basa en la creciente evidencia que vincula la salud bucal con las enfermedades sistémicas. Un ensayo reciente en el University College de Londres encontró que el tratamiento de la enfermedad grave de las encías podría evitar que las arterias se obstruyan, reduciendo el riesgo de enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares. Ambos estudios subrayan el papel de la inflamación en la conducción de enfermedades crónicas.

Las enfermedades de las encías y las infecciones dentales ahora deben considerarse “factores de riesgo no tradicionales” de enfermedades sistémicas, según el Dr. Marco Orlandi, coinvestigador principal del ensayo de la UCL.

En conclusión, aunque a menudo se teme, el tratamiento de conducto puede ofrecer beneficios sistémicos inesperados, incluido un mejor control metabólico y una reducción de la inflamación. Dar prioridad a la salud bucal mediante chequeos regulares y el tratamiento oportuno de las infecciones podría contribuir significativamente a prevenir enfermedades crónicas en todo el mundo.