El nuevo libro del físico Paul Davies, Quantum 2.0, presenta una ambiciosa visión general del pasado, presente y futuro de la física cuántica. Si bien Davies es un escritor hábil y entusiasta, el libro a veces se inclina hacia la especulación en lugar de un análisis riguroso, particularmente cuando analiza aplicaciones a corto plazo. Esto hace que la lectura sea atractiva, pero a costa de los matices y la perspectiva equilibrada.
El encanto y los límites de la excitación cuántica
Davies se destaca a la hora de explicar conceptos cuánticos complejos sin depender de densas ecuaciones matemáticas. Cubre tecnologías cuánticas (computación, comunicación, detección) junto con áreas emergentes como la biología cuántica y la cosmología. El libro es notablemente accesible, incluso para aquellos que no están familiarizados con el campo. Sin embargo, el celo de Davies en ocasiones eclipsa detalles críticos; unas cuantas citas más habrían sido más apropiadas que ingeniosas frases.
El problema central no es la inexactitud, sino más bien una exageración de las capacidades actuales. Por ejemplo, Davies sugiere que las computadoras cuánticas podrían avanzar significativamente en la modelización climática en el futuro cercano. Si bien es teóricamente posible, muchos informáticos y matemáticos no están de acuerdo sobre su viabilidad a corto plazo. De manera similar, cita fabricantes que afirman que los sensores cuánticos podrían diagnosticar afecciones neurológicas como la epilepsia o el autismo sin un contexto crítico suficiente.
El peligro del optimismo desequilibrado
La mayor debilidad del libro es su tendencia a presentar afirmaciones especulativas tan cercanas a la verdad establecida. Davies afirma: “Es seguro decir que quien controla Quantum 2.0 controla el mundo”. Si bien las tecnologías cuánticas ciertamente sustentan muchos dispositivos modernos, equiparar el dominio en este campo con el poder global parece hiperbólico.
Esto es importante porque la exageración distorsiona la comprensión pública. El rápido ritmo de la investigación cuántica hace que sea fácil quedarse atrás; Los ejemplos obsoletos y las promesas exageradas pueden engañar a los lectores que no están familiarizados con el campo. Davies reconoce el potencial de la biología cuántica y de una futura teoría cuántica de la gravedad, pero no logra moderar adecuadamente estas posibilidades con plazos realistas y limitaciones actuales.
Una introducción valiosa, pero lea con precaución
Quantum 2.0 es una valiosa introducción al mundo de la física cuántica, especialmente para aquellos sin formación científica. El estilo de escritura de Davies hace que el tema sea atractivo y accesible. Sin embargo, los lectores deben abordar las afirmaciones especulativas con escepticismo, reconociendo que el entusiasmo por las tecnologías cuánticas siempre debe ir acompañado de un análisis crítico.
En esencia, el libro de Davies es una visión emocionante del potencial de la física cuántica, pero que requiere una buena dosis de realismo para apreciarla plenamente.
